mayo 28, 2004
la vuelta
Volví. Ella también. Por un momento creí que tal vez yo no iba a volver al análisis. Que todo se iba a complicar. O que yo lo iba a dejar pasar. Pero no. Me alegro de haber vuelto y de haber fantaseado con no hacerlo. Hay que remontarla. Hay que poder escuchar algunas cosas reprimiendo el instinto ( asesino) de pararse, darle la mano y despedirse para no volver. Y a la vez sentirse sumergida en la neblina pero confiar en que en algún momento se va a dispersar y veré con claridad. Y de repente llega una palabra que entra. Entra y dispara imágenes y sensaciones. Resuena. Y ruego y espero con ansia ( en plaza francia) que mi propia cabeza, el yo, el ello, el superyo, el inconsciente y todos los que se quieran sumar colaboren de una vez, haciendo o deshaciendo o dejando que hagan sobre ellos. Pero por favor!! necesito un poco fluidez, dejar de sufrirme. Alguien que no puede estar sola, que necesita el amparo de otro permanentemente tiene miedo de algo. Está asustada. El susto. Algo así dijo. Dejaré que las palabras penetren. Que trabajen ellas. Yo, por esta semana, ya tuve suficiente.